Del pollo podemos usar todas y cada una de sus partes para elaborar diferentes recetas, por lo que no debemos tener miedo de comprar el pollo entero y despiezarlo en casa.
Despiezar el pollo en casa no es difícil, solo tenemos que seguir los pasos indicados y utilizar un cuchillo afilado. Las ventajas de comprar el pollo entero y cortarlo nosotros mismos son muchas, empezando por la parte económica: es más barato el kg de pollo entero que de pechugas o de muslos.
Trocear el pollo en casa nos permitirá también aprovechar las diferentes partes del pollo para elaborar diferentes recetas. Pues como ya hemos dicho: del pollo se puede aprovechar todo y hay unas partes que son mejores para determinadas recetas que otras.
Por qué es mejor despiezar el pollo en casa
El ahorro económico es uno de los principales motivos que nos llevan a comprar un pollo entero. Si nos fijamos el el precio por kilo veremos que el precio de las pechugas puede llegar incluso a triplicar el precio del kilo en un pollo entero. Así pues, por casi el mismo precio de dos pechugas podríamos llegar a comprar una pieza de pollo entero de casi 2 kg. ¿No te lo crees? Haz la prueba y compruébalo.
El factor ecológico también es determinante. En la mayoría de ocasiones compramos el pollo en supermercados y no directamente en una carnicería. El impacto medioambiental es enorme, pues aunque solo queramos comprar dos pechugas de pollo nos llevamos una bandeja de plástico con un trozo de papel absorbente que retiene los jugos; y todo ello envuelto con una generosa capa de film.
Aunque quizás el punto más importante y que deberíamos tener siempre presente es que el pollo entero se conserva mejor. Cuando realizamos el primer corte estamos abriendo la puerta a las diferentes bacterias, las cuales van a empezar a actuar inmediatamente. Un pollo entero nos durará un par de días en la nevera, mientras que lo recomendable una vez troceado, sería consumirlo o congelarlo a las pocas horas.
Qué necesitamos para despiezar un pollo en casa
Como ya hemos dicho, el despiece de un pollo es muy sencillo y es posible hacerlo en casa con solo 2 utensilios de cocina básicos que seguro ya tienes en casa: un cuchillo bien afilado y una buena tabla de cocina para cortar.
El cuchillo
Seguro que en casa tienes un cuchillo Chef, conocido también como cuchillo cebollero. Es el cuchillo básico en cocina y también el más versátil, ya que podemos utilizarlo para muchos tipos de corte diferentes.
Si todavía no lo tienes te gustará saber que tener un buen cuchillo de este tipo será una buena inversión, pes podrás usarlo para picar, cortar y rebanar frutas y verduras, carnes y pescados.
Se caracteriza por tener una hoja de unos 20 cm y lo más importante es que lo tengamos siempre bien afilado. Aunque suene contradictorio es más fácil que nos cortemos o nos hagamos daño con un cuchillo que corta poco que con uno bien afilado.
Con este tipo de cuchillo tendremos suficiente y no necesitaremos una macheta de carnicero, ya que todos los cortes los realizaremos por las articulaciones.
La tabla de cortar
Una buena tabla de cocina también es básica e imprescindible. En el mercado las hay de muchos tamaños y materiales y no todas nos van a servir. Una buena tabla no debe moverse ni deslizarse sobre la encimera, ya que no solo corremos el riesgo de cortarnos, si no que además no obtendremos cortes limpios.
Además deberá tener el tamaño adecuado. Si vamos a despiezar un pollo la tabla deberá ser mayor que el tamaño del pollo, ya que nos resultaría imposible trabajar en una superficie más pequeña.
El material del que esté hecha también es fundamental, pues tenemos que poder limpiarla en profundidad para evitar la proliferación de bacterias o la contaminación cruzada.
Consejos de seguridad e higiene a la hora de trocear pollo en casa
Seguramente habrás escuchado en alguna ocasión que el pollo crudo es fuente de bacterias, como por ejemplo la salmonella. Es por eso, que para evitar la contaminación cruzada es importante que la carne de pollo cruda no entre en contacto con otros alimentos, ni crudos ni cocinados.
Una vez hayamos acabado de trocear el pollo, limpiaremos en profundidad la tabla de cortar y el cuchillo utilizado con agua caliente y jabón, eliminando muy bien los posibles restos de carne.
Además, como ya hemos mencionado un poco más arriba, para evitar cortarnos, será importante que la tabla de cortar este bien asentada en la encimera y no se mueva mientras cortemos. El cuchillo deberá también estar bien afilado.
Despiece de pollo entero paso a paso
Coloca el pollo con el pecho hacia arriba y los muslos mirando hacia ti. Corta la piel que une el muslo con la carcasa y quedará a la vista la articulación por la que debemos separar el muslo de la carcasa. Podremos dejar el muslo entero o cortarlo por la articulación, separando así los jamoncitos o muslitos del contramuslo. Repetimos con el otro lado.
A continuación vamos a extraer las alas. La estiramos para ver exactamente donde se encuentra la articulación. Una vez localizada la articulación más cercana a la carcasa, cortamos; separando así las alas del pollo. Una vez más podremos escoger dejar el ala entera o trocearla cortando por las otras dos articulaciones.
Para extraer las pechugas de pollo, primero retira la piel que las cubre. Para hacerlo realiza un corte longitudinal en la piel por encima del hueso central de las pechugas; podrás retirar la piel fácilmente tirando con las manos.
Tomando como referencia el hueso central de la carcasa, realiza un corte muy pegado a ese hueso para empezar a separar la pechuga. Sigue con la punta del cuchillo bien pegada a la carcasa del pollo, las costillas te irán indicando por donde cortar. Cuando más cerca mantengas el cuchillo del hueso, más grande será la pechuga y quedará menos carne pegada a la carcasa. La pechuga podremos dejarla entera, filetearla o cortarla en dados en función de la receta que vayamos a preparar.
Al final tendremos las diferentes piezas de pollo por un lado y la carcasa y las puntas de las alas por otro. No los deseches, pues aunque la carcasa de pollo tiene poca carne es ideal para preparar caldo de pollo casero, pues es la parte que le da más sabor.
Despiece de un pollo en cuartos
Hasta el momento hemos visto cómo despiezar poco a poco el pollo entero, pero también es habitual separarlo en cuartos delanteros y cuartos traseros.
- Los cuartos delanteros de pollo incluyen las pechugas y las alitas.
- Los cuartos traseros de pollo incluyen el muslo y el contramuslo en una sola pieza.
Qué hago con un pollo entero despiezado
Una vez tengamos el pollo correctamente troceado tenemos dos opciones: cocinarlo o congelarlo para consumirlo en un futuro.
Si hablamos de las alitas de pollo, con un solo pollo no tenemos suficiente cantidad para elaborar ninguna receta con ellas. Es por eso que lo mejor será congelarlas e ir juntándolas en una bolsa de congelación con las alas de otros pollos que despiecemos en otra ocasión. Con el tiempo tendremos la cantidad suficiente de alitas de pollo para preparar una receta con ellas.
Mi recomendación en cuanto a las puntas de las alitas y las carcasas, es preparar inmediatamente caldo de pollo casero. Una vez lo tengas listo podrás congelarlo y así disponer de un delicioso caldo de pollo casero en cualquier momento.
Para congelar el pollo, lo ideal es congelar cada porción por separado, ya sean pechugas o jamoncitos. Una vez estén bien congelados, podremos unirlos en una misma bolsa de congelación. De esta manera, cuando queramos consumirlo, podremos sacar y descongelar solo la parte que nos interese. Si lo congelamos todo a la vez en una misma bolsa, al congelarse quedarán todos los cortes de pollo pegados los unos a los otros y nos veremos obligados a descongelarlo todo de una vez.
Recuerda que una vez descongelado, el pollo no podrá volverse a congelar a no ser que lo cocinemos primero.
La mejor forma de descongelar el pollo será siempre dejarlo en la nevera el día antes, para que así se vaya descongelando poco a poco. Nunca debemos dejar el pollo fuera de la nevera (congelado o sin congelar) y mucho menos en verano para prevenir la salmonella o la contaminación cruzada.
Y hasta aquí la explicación sobre cómo despiezar un pollo entero paso a paso. Si tienes alguna pregunta sobre lo que te hemos contado o sobre alguna receta, no dudes en dejar un comentario ¡intentaremos responderte lo antes posible!