Las torrijas de vino tinto son un postre tradicional de Semana Santa exclusivamente dirigido a los adultos de la casa. El resultado son unas torrijas tremendamente jugosas y con un intenso sabor a vino tinto.
Hacerlas es muy fácil y solo necesitaremos unos pocos ingredientes. Además podremos servirlas tanto frías como calientes con un poco de azúcar glas, canela y/o miel por encima.
Hay infinidad de posibilidades a la hora de preparar torrijas, pues existen las torrijas de leche, las torrijas de chocolate, las torrijas de nata,… y cada casa tiene su receta o modo de hacerlas. Si bien de una casa a otra no suelen variar mucho, a continuación te dejaré cómo preparamos nosotros las torrijas de vino, ya sea con vino blanco, tinto o cava. Sin ninguna duda es el postre perfecto para la Cuaresma.
Para hacer unas buenas torrijas, lo recomendable es usar pan duro del día anterior, pues así absorberán una mayor cantidad de líquido y quedarán mucho más jugosas. En el vídeo que te dejo a continuación encontrarás también la receta paso a paso de un pan especial para hacer torrijas, que se caracteriza por tener una miga densa y una corteza fina. Te aseguro que cuando lo pruebes, no las harás con ningún otro pan.
Vídeo de la receta paso a paso
Torrijas de vino tinto
Ingredientes
- 500 ml vino tinto
- 300 ml agua
- 225 g azúcar
- 1 rama canela
- 1 piel de naranja (sin la parte blanca)
- 8 rebanadas pan para torrijas casero
- 2 huevos
- Aceite suave para freír
- Azúcar glas, canela o miel para el toque final (opcional)
Elaboración paso a paso
- Empezaremos preparando la infusión de vino tinto con la que empaparemos el pan. Para ello, en un cazo a fuego medio, colocamos el vino tiento, la rama de canela, la piel de una naranja (sin la parte blanca), el azúcar y el agua.
- Vamos removiendo de vez en cuando para que el azúcar se integre bien. Cuando empiece a hervir retiramos del fuego y dejamos reposar un par de minutos mientras preparamos el pan.
- Con la ayuda de un cuchillo de sierra cortamos el pan en rebanadas de 1½ centímetro aproximadamente y las colocamos en una fuente con bordes altos.
- Vertemos la infusión de vino bien caliente por encima y dejamos reposar unos 10 minutos o hasta que el pan haya absorbido todo o gran parte del líquido.
- Batimos 2 huevos y bañamos una torrija en el huevo, intentando que nos quede bien cubierta por ambos lados.
- Cuando esté bien bañada en huevo, la freímos directamente en una sartén que ya tendremos preparada con abundante aceite caliente. Cuando esté dorada por un lado, le damos la vuelta con mucho cuidado. Repetimos el mismo proceso con el resto de torrijas.
- Cuando las tengamos doraditas, las colocamos en un plato cubierto con papel de cocina para que absorba el exceso de aceite.
- Servimos las torrijas frías o calientes con azúcar glas o miel por encima.
Que interesante, con vino tinto! Tienen que estar deliciosas esas torrijas!
Besos
Están tremenda, son una receta antigua de las abuelas! muaks