¡Buenos días! tengo la impresión de que esta entrada se va a alargar un poquito, ya que os traigo la receta de Crepes. No, no se va a alargar porque sea una receta con muchos ingredientes, con muchos pasos a seguir o muy complicada, más bien todo lo contrario. No obstante, es a partir del descubrimiento de esta receta que empieza a despertar y «florecer» en mí el interés por la cocina y por todo lo relacionado con ella. ¿Te interesa la historia? Pues sigue leyendo…
La verdad es que la historia de cómo aprendí a hacerlos es bastante curiosa y se remonta unos cuantos años atrás. Yo tendría alrededor de 7 años cuando, acompañando a mi madre a una librería, hubo un libro que -sin saber cómo ni por qué- llamó mi atención, no sé muy bien el motivo ¡pero ese libro tenía que ser mío! El nombre del libro: «Carolina aprende a cocinar«.
Desde ese día le insistí a mi madre para que me ayudara a preparar los crepes. En casa nunca los habíamos hecho, pero recordaba que los habíamos comido algunas veces en la feria y que estaban tan ricos que quería volver a comerlos. Al principio mi madre no me hacía mucho caso ya que ¿cómo va a ser buena o real una receta de un libro infantil? pero al final conseguí convencerla y ¡bendita mi suerte, que buenos que están! No te miento si te digo que los he rellenado de un montón de cosas diferentes, tanto dulces como saladas, ya iré colgando algunos de los rellenos más ricos que se me vayan ocurriendo.
Desde ese momento este libro me ha acompañado siempre, incluso ahora, cuando quiero volver a preparar crepes voy corriendo a buscar ese libro que tantos recuerdos me trae y que espero regalar algún día a mis hijos. Y es que fue ese libro el que destapó mi curiosidad temprana por la cocina, motivo por el cual, ya sea por suerte o por desgracia de mi madre, ya no consiguió librarse ni un segundo de mí en la cocina. ¡Quién sabe lo que hubiese podido pasar si mi madre no me hubiese regalado ese libro o si me hubiese llamado la atención otro libro!
Pero ya no os aburro más con mis historias, y paso a lo que de verdad os interesa: la RECETA!
Ingredientes para los crepes caseros (para 2 personas):
125 gr de harina, 2 huevos, 1 vaso de leche y -opcional- una pizca de sal o azúcar y canela (dependiendo de si los queremos hacer dulces o salados; yo no suelo echar ni sal ni azúcar, considero que con el relleno ya es suficiente). Además necesitaremos: relleno al gusto (en mi caso crema de cacao y rodajas de plátano, aunque no están nada mal rellenos de crema pastelera).
Elaboración de los crepes caseros:
Vamos a mezclar todos los ingredientes de manera homogénea. Recuerda que si los vas a hacer dulces puedes añadir a la masa un poco de azúcar y canela o, si los vais a hacer salados, un poquito de sal. Eso dependerá un poco del relleno que quieras ponerle y al gusto de cada uno ya que, por ejemplo, en caso de querer rellenarlo de chocolate yo no le añado azúcar a la base porque me parece excesivo.
A continuación vertemos, con la ayuda de un cucharon, un poco de la mezcla en la sartén; ponemos la cantidad justa para que nos quede un crepe finito. Dejamos unos minutos y damos la vuelta. Repetimos el proceso hasta terminar la masa.
Ya solo nos queda rellenarlo a nuestro gusto, tanto dulce, como salado.