Ya ha llegado la primavera, así que es el momento de preparar postres fríos y coloridos. Hoy me decanto por un elegante cheesecake de mantequilla de cacahuete en formato individual. Para darles un toque aún más delicioso los he coronado con una enorme fresa bañada en chocolate ¡absolutamente irresistible!
Los mini cheesecakes de mantequilla de cacahuete son el postre ideal, ya que al presentarlos en versión individual podemos prepararlas con diferentes coberturas y así cada uno de nuestros invitados elija la que más le guste. Puedes usar diferentes mermeladas, más mantequilla de cacahuete, chocolate, diferentes frutas frescas o fresas bañadas en chocolate.
Lo que más me gusta de las cheesecakes es que no solo son el postre ideal para preparar con antelación, sino que al día siguiente están todavía más ricas que recién preparadas.
Vídeo de la receta paso a paso:
Ingredientes para 12 mini cheesecakes de mantequilla de cacahuete:
Para la base de galleta:
- 120 gr de galletas tipo maria
- 50 gr de mantequilla sin sal
Para el cheesecake de mantequilla de cacahuete:
- 250 gr de queso crema
- 85 gr de azúcar
- 60 gr de yogur natural
- 2 huevos
- 125 gr de mantequilla de cacahuete
Para decorar:
- Mantequilla de cacahuete
- Fresas bañadas en chocolate
Herramientas que necesitaremos para elaborar esta receta:
- Bandeja para hornear 12 cupcakes
- Capsulas de papel para cupcakes
- Rejilla de enfriado
- Procesador de alimentos
- Varillas eléctricas
- Espátula de silicona de Tupperware
Elaboración de los mini cheesecakes de mantequilla de cacahuete:
Empezaremos preparando la base de las mini cheesecakes, para ello picamos las galletas y las mezclamos con la mantequilla derretida.
Colocamos una cápsula de papel en cada hueco de la bandeja para hornear cupcakes y agregamos una cucharada de la mezcla de galleta picada con mantequilla. Apretamos bien con una cuchara para que nos quede una base compacta. Dejamos a un lado mientras preparamos el relleno.
Con la ayuda de unas varillas eléctricas, batimos el queso crema con el azúcar hasta conseguir una mezcla cremosa. Agregamos los huevos y batimos bien. Cuando estén integrados añadiremos el yogur. Con la ayuda de una espátula de silicona despegamos la masa pegada en los laterales del cuenco. Agregamos la crema de mantequilla y seguimos mezclando hasta conseguir una mezcla homogénea.
Rellenamos las cápsulas casi por completo y llevamos al horno precalentado a 160 ºC unos 20 minutos hasta que estén listos.
Los dejaremos enfriar por completo sobre una rejilla y los llevaremos a la nevera unas 3 o 4 horas. Pasado este tiempo las untaremos con un poco de mantequilla de cacahuete y mermelada o fruta fresca. En esta ocasión yo los he coronado con una fresa bañada en chocolate.
Volveremos a llevar a la nevera hasta el momento de servirlas.