Preparar una ensalada fría de patata y queso feta es muy fácil y rápido, pues con una sencilla elaboración y unos pocos ingredientes tendremos un primer plato o guarnición deliciosa para el verano.
La base de esta ensalada es la patata cocida. En esta ocasión, para ahorrar tiempo, la he pelado y troceado antes de cocerla, pero si lo deseas podrás cocerla entera con la piel. Para cocer las patatas enteras, primero las enjuagaremos bien bajo el grifo para eliminar los restos de tierra y las cubriremos con agua y una pizca de sal.
La ventaja de cocinar la patata entera, es que nos quedará con una textura más melosa y retendrá una mayor parte de nutrientes. La desventaja, es que al estar entera y ser más grande, tardará más tiempo en cocinarse. Una vez cocida, la escurriremos y la dejaremos enfriar un poco antes de pelarla y trocearla para no quemarnos. Si hemos limpiado bien la piel antes de cocinarla, podremos dejarla y comerla también.
La clave para preparar una ensalada de 10, está en utilizar un buen aceite de oliva virgen extra, y para esta ocasión me he decantado por un maravilloso AOVE con Denominación de Origen Montes de Granada. Un aceite de oliva de una calidad superior elaborado únicamente con las variedades Picual, Martña, Loaime, Lucio, Hojiblanca, Gordal de Granada y variedades autóctonas del ámbito protegido Escarabajuelo y Negrillo de Iznalloz.
Este AOVE con DOP Montes de Granada tiene un aroma intenso. Con un sabor frutado y olor a hierba recién cortada, me encanta disfrutarlo en una rebanada de pan, un tomate bien maduro y unas pocas escamas de sal. Poco más hace falta, pues este aceite se convertirá en el auténtico protagonista del plato. Y es que a todos los que nos gusta la cocina o disfrutamos comiendo, sabemos que un buen AOVE no puede faltar en casa, porque este producto, tan típico de la gastronomía mediterránea, es oro líquido e ideal para cualquier elaboración.
Vídeo de la receta paso a paso
A continuación te dejo un vídeo con la elaboración paso a paso de la receta, así no tendrás excusa para no prepararla. Aprovecho para recordarte que en mi canal de YouTube publico una nueva receta y muchos trucos todas las semanas, así que no dudes en suscribirte ya mismo. Tu apoyo es muy importante para seguir creando contenidos.
Ensalada fría de patata y queso feta, receta fácil y rápida
Ingredientes
- 1,5 kg patatas
- 250 g queso feta
- Aceite de oliva virgen extra
- Cilantro o perejil fresco
- 1 cebolla morada pequeña
- Sal
Utensilios recomendados para esta receta
A continuación detallo algunos utensilios que he usado para esta receta y que puedes encontrar en Amazon u otros sitios (contiene enlaces de afiliado).
Elaboración paso a paso
- En primer lugar pelamos las patatas y las troceamos en dados irregulares de un bocado, intentando que nos queden todos de un tamaño similar. Enjuagamos las patatas bajo el grifo hasta que queden bien limpias.
- Colocamos las patas en un cazo y las cubrimos con agua. Agregamos una cucharadita de sal y llevamos a ebullición. El tiempo de cocción de las patatas dependerá del tamaño de los trozos, así que iremos controlado el punto de cocción de vez en cuando. Sabremos que las patatas estás listas, cuando las pinchemos con un cuchillo y notemos que están blandas.
- Escurrimos las patatas con la ayuda de un colador y las dejamos enfriar por completo. Para que se enfríen más rápido, podremos extenderlas sobre una bandeja.
- Cuando las patatas estén a temperatura ambiente, pelamos la cebolla morada y la troceamos en una juliana fina, es decir en lonchas muy finas.
- Limpiamos y secamos el cilantro o el perejil fresco y lo picamos finamente con la ayuda de un cuchillo.
- Repartimos la cebolla troceada y el cilantro picado sobre las patatas. Con la ayuda de nuestras manos, desmenuzamos el queso feta y lo repartimos también encima de las patatas.
- Finalmente, regamos la ensalada con un buen chorro de aceite de oliva virgen extra y llevamos a la nevera hasta el momento de servir.
Notas
Espero que te haya gustado esta receta de ensalada fría de patata y queso feta y que te animes a prepararla, pues su elaboración es muy sencilla y rápida. Además es un primer plato o guarnición perfecto para el verano.