Cuando se trata de preparar una comida principal, no siempre debemos apostar por ingredientes difíciles de conseguir o cuya preparación suponga un trabajo tan importante. En ocasiones, lo más fácil nos va bien, nos sienta mejor y el sabor es más intenso.
En esta oportunidad prepararemos una ensalada tomando como base productos cárnicos. Sin embargo, la parte más importante no sólo dependerá de estos elementos, sino de su combinación con los vegetales y las verduras que vamos a utilizar.
A tomar nota, que los ingredientes son muy fáciles de conseguir y prepararlos es coser y cantar.
Ingredientes para la ensalada de cervelas
- Salchichas Cervelas: Utilizaremos Cervelas porque su sabor ahumado nos permitirá encontrar un fuerte aroma a carbón, a las comidas preparadas a la parrilla. De allí que esta receta sea excelente para una comida principal de fin de semana. Dentro de las Cervelas, preferimos las que están elaboradas totalmente de carne de vacuno, de modo que podamos colocar al beicon como una contraparte de cerdo.
- Beicon o panceta: Mejor que sea beicon. Para la practicidad de esta receta, lo hemos comprado rebanado en el supermercado y recomendamos que se haga de esta manera. Así, no malgastarás tiempo en el corte de cada pieza, porque necesitaremos que sean muy finas para preparar una ensalada con mucho equilibrio.
- Cebollas: Moradas o blancas, pero que sean grandes. Necesitaremos, para preparar un bol para 4 personas, alrededor de 3 cebollas grandes. Dicho esto, es una ensalada con mucha predilección por la cebolla, por lo que deberás acompañarla con algún alimento como las patatas horneadas o salteadas, para equilibrar los sabores.
- Pimientos: Nos servirán para resaltar el sabor ahumado de los elementos cárnicos de nuestra receta (el beicon y las salchichas cervelas). Al igual que con la cebolla, representan los principales ingredientes vegetales de la ensalada, por lo que se deben escoger pimientos grandes y necesitaremos entre 2 y 3 de estos. Puedes elegir uno de cada color, para dar frescura a la receta.
- Maíz dulce: Dependiendo de tu facilidad para comprarlo, puedes optar por el maíz dulce fresco (preferiblemente) o el maíz dulce enlatado o en conserva. En cuestiones de sabor, no hay ninguna diferencia que sea significativa entre alguno de los dos. El segundo, claro está, te permitirá avanzar más rápido en tu receta. Utilizaremos enlatado en este caso. Bastará con 1 lata (425 gr.).
- Queso: Para esta receta utilizaremos queso parmesano. La cantidad variará dependiendo de la cantidad de personas, y de cuánto queso quieras agregarle. Debes comprar queso parmesano entero, más no en polvo. El queso entero quedará mucho mejor con nuestra receta, y no se perderá entre los líquidos propios de los ingredientes vegetales.
- Jamón: Por la cantidad de grasa y calorías de los cárnicos principales de la receta (beicon y salchichas), recomendamos utilizar un jamón de pavo, en tanto se pueda. Utilizaremos en torno a 250 gr. de jamón de pavo para esta receta, y lo necesitamos, igual, entero, en una pieza.
- 3 huevos
- Aceite y vinagre
- Perejil y/o ajo
La preparación
En un bol, cortar las salchichas en trocitos cuadrados medianos o pequeños. Dependiendo de la cantidad que uses. Mientras más salchichas quieras utilizar, menor tamaño deben tener, porque de lo contrario ocuparán un volumen importante en cualquier recipiente.
Cortar la cebolla y los pimientos. Hay que hacerlo en tiras o julianas, a modo de que podamos freírlas mejor en un sartén, que es lo que haremos a continuación.
Cocinar el beicon junto con las cebollas y los pimientos. Les permitirá absorber parte de las grasas del beicon a los vegetales, y les brindará un sabor ahumado muy particular, que requerimos en la receta.
Las cebollas y los pimientos se pueden cortar en tiras, y si lo prefieres puedes no cocinarlas junto al beicon. En ese caso, se sofríe el beicon por un lado y se agrega al bol donde están las salchichas cortadas en cuadrados pequeños. Luego, se añaden los vegetales crudos cortados al bol.
Cocer los huevos. Cuando estén cocidos, quitamos la cáscara de los huevos y cortamos en trocitos. Acto seguido, sazonamos con un poco de sal y los agregamos al bol de la ensalada.
Agregamos el maíz dulce. Recuerda que antes de echarlos al bol deben ser previamente lavados. Para hacerlo, basta con colocar los granos de maíz dulce en un colador de zumos y lavarlos brevemente con agua a temperatura ambiente. Luego, escurrimos y vertemos en el bol de la ensalada.
Cortamos el queso y el jamón. Hemos preferido el queso y el jamón en piezas, porque podemos cortarlos en cuadritos y se ven mucho mejor en la ensalada. Si no te ha sido posible encontrar piezas, puedes echar trocitos de queso y de jamón en la ensalada, siempre y cuando su tamaño sea mediano.
Es hora de remover todos los ingredientes en el bol. Luego, se rocía un chorrito de aceite (puede ser cualquiera, no necesariamente de oliva) y una cucharadita de vinagre.
Para darle un toque aromático especial, utilizaremos unas ramitas de perejil y un par de granos de ajo, previamente machacados.
Luego, es hora de volver a remover.
¿Cómo servir la ensalada?
Esta ensalada de salchichas cervelas y beicon debe guardarse en el frigorífico una vez se ha terminado de preparar, para que los vegetales se conserven en muy buen estado y para que todos los sabores puedan intensificarse.
Para servirla no hace falta calentarla, ya que puede comerse fría. De ese modo, es una de las mejores recetas para comer durante el verano, o para comenzar una mañana, en caso de que se prepare en la noche anterior.
La utilización de esta clase de salchichas le confiere un toque ahumado que le sienta muy bien en su combinación con el jamón, el queso parmesano y, sobre todo, con el beicon, siendo este el protagonista secundario de la receta.
Se debe acompañar con pan o con un puré de patatas, porque su sabor es fuerte e intenso.
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