Los que disfrutamos de la cocina tenemos algo en común con los que cocinan únicamente porque tienen que comer, con los cocineros inexpertos, con aquellos a los que les gusta experimentar o con los que solo se limitan a elaborar recetas básicas y rápidas porque el tiempo no les da para más.
Al igual que cualquier actividad, cocinar, requiere disponer de unas herramientas básicas que nos permitan elaborar nuestros platos. Da igual si esos platos serán más o menos elaborados. No podemos pasar por alto el hecho de que disponer de un equipamiento básico nos ayudará a que la tarea de cocinar nos resulte más sencilla.
Tomando esta premisa como la base, vamos a intentar ver cuáles son esos utensilios o herramientas esenciales a la hora de cocinar. Si bien ya te digo que todos ellos son básicos, no es imprescindible disponer de todos ellos desde un primer momento, pues cuando hablamos de menaje de cocina siempre es mejor apostar por la calidad antes de por la cantidad.
Así pues, desde un primer momento estableceremos prioridades según los utensilios que usaremos con más frecuencia, para así, poco a poco, ir completando «la colección».
Ollas, cazos y sartenes
Si buscamos bien, podemos encontrar baterías de cocina profesionales bastante bien de precio.
El tamaño de las ollas, dependerá de cuántos seamos en casa. No será lo mismo cocinar para 2 que si en casa comemos 8 todos los días.
Con los años he aprendido que cuando hablamos de sartenes, la calidad es la clave. Tras probar varios modelos, mi recomendación es que merece la pena invertir en sartenes de fondo grueso, ya que reparten el calor de forma mucho más uniforme que las finas. Además, personalmente me gustan más las que no llevan recubrimientos de teflón, ya que tienden a ser más resistentes. Un consejo: si la compras con el mango de metal, podrás meterla también el horno para acabar tus platos.
En cuanto a los cazos y cazuelas, también podemos encontrar infinidad de modelos, materiales y tamaños. Una vez más te recomiendo las de fondo grueso, pues aguantan muy bien el calor y lo reparten de forma más uniforme. Como imprescindible podríamos mencionar un cazo, una cacerola baja con tapa y 1 o 2 cacerolas altas con diferentes capacidades.
En cuanto a las tapas, yo las prefiero de cristal, ya que así puedo controlar los alimentos sin necesidad de destapar.
Cuchillos y tabla de cortar
Es muy importante disponer de cuchillos bien afilados. Aunque suene raro, es mucho más fácil que nos cortemos con un cuchillo mal afilado, ya que al apoyarlo sobre el alimento puede resbalarse.
Entre los imprescindibles encontramos el cuchillo de 10 cm, el típico que se usa para pelar patatas.
El cuchillo de 20 cm, también conocido como cuchillo chef o de cocinero, será perfecto para picar verduras y trocear carne.
En cuanto a las tablas de cortar, es importante que tengan el tamaño adecuado y que se puedan limpiar fácilmente. Las podemos encontrar de muchos materiales, solo debemos escoger la que más nos guste.
Moldes
Cuando te hablo de comprar moldes para cocina se abre un gran abanico de posibilidades. Desde aros de emplatado hasta moldes para cubitos de hielo, siempre adaptándose a tu actividad en la cocina.
En casa, por ejemplo, no pueden faltar moldes para hornear bizcochos de diferentes formas y tamaños. Si vas a utilizarlos en contadas ocasiones, apuesta igualmente por la calidad. Escoge un molde con el tamaño y forma que más te convenga y así siempre lo tendrás listo para usarlo.
Otros utensilios básicos
Aquí voy a agrupar esos elementos sin los cuales se complicaría mucho la tarea de cocinar. El cucharón, la espumadera, unas varillas o unas pinzas serán imprescindibles. Podemos encontrarlos de diferentes materiales, aunque yo apuesto siempre por la madera o el acero inoxidable para determinadas piezas.
Un rallador, un colador, un exprimidor, unos guantes para horno o agarradores y una báscula de cocina digital también serán imprescindibles.
También nos vendrán bien…
Hasta aquí hemos enumerado los diferentes elementos básicos e imprescindibles que nos permitirán cocinar de forma cómoda.
Hay otros utensilios, que aunque no son imprescindibles nos resultarán de gran utilidad a la hora de cocinar. Las jarras, las tazas y las cucharas medidoras son un buen ejemplo de ello, ya que muchas recetas nos indican las cantidades en tazas (cups) o cucharadas (tablespoons).
Los cuencos y boles de trabajo no solo nos servirán para preparar masas y mezclar ingredientes, también son ideales para servir ensaladas.
Tarros y tuppers de cristal son imprescindibles. Tanto para elaborar conservas caseras, para marinar o para conservar las sobras en la nevera. Lo ideal es tener unos cuantos de diferente tamaño. Además, los tarros de cristal son ideales para conservar la pasta, el arroz y las legumbres.